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Esto podría ser sólo la punta del iceberg en fallas no identificadas.
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Las ventajas de Ethereum siguen siendo más atractivas que sus riesgos.
La plataforma de Vitalik Buterin, junto su criptomoneda nativa, es quizás la que más ha tenido que sufrir bifurcaciones por uno u otro motivo. Seguramente la más recordada, y por la que de hecho la blockchain se dividió en Ethereum y Ethereum Classic, fue la que tuvo que realizarse a consecuencia del gran hackeo a DAO el pasado junio.
Sin embargo, ese hardfork fue sólo el primero. El pasado 18 de octubre llevaron a cabo otro con la intención de fortalecer la plataforma ante ataques DDoS, y anunciaron el último, llamado Spurious Dragon, que finamente se dio el 22 de noviembre para limpiar varias transacciones, cuentas y contratos vacíos que fueron creados durante los ataques.
Todos se han realizado con el fin último de fortalecer y mejorar Ethereum, pero todo indica que esta vez algo falló. Al cliente informático Go Ethereum (conocido como Geth) se le realizaron nuevas implementaciones que serían aplicadas en el nuevo hardfork, pero no realizaron bien su trabajo y, según se indica en el Reddit de Ethereum, el libro contable del cliente Geth falló para revertir la eliminación de transacciones de las cuentas vacías, que esencialmente fue la principal razón de sus modificaciones y del Spurious Dragon, lo que ocasionó su desincronización con otros clientes como Parity, que evitaron el apagón de la red de Ethereum.
La falla se descubrió en una transacción específica, así que Buterin solicitó a las casas de cambio detener todas las operaciones en ETH hasta que lograran arreglarla, pues ya han identificado una solución y se encuentran en pruebas. De modo que el siguiente paso para sus usuarios es esperar y, posteriormente, ejecutar los nuevos Geth si se sincronizan más allá del hardfork o bien rebobinar hasta al punto del mismo y sincronizar desde allí.
Consensus update: @VitalikButerin now saying issue is with Geth and Parity is the right chain! wtf?! #Ethereum pic.twitter.com/sEbCvoP3d4
— Chris Ellis (@MrChrisEllis) 24 de noviembre de 2016
Pese a estos esfuerzos, el precio del ETH ha caído con fuerza y sigue con tendencia descendente. No ha perdido su lugar como segunda criptomoneda con mayor capitalización en el mercado, pero ha descendido casi un 8% al momento de escribir esta nota, pasando de valer $9.8 a sólo $9 y contando en menos de un día.
Por otro lado, ya a principios de este mes se identificó un error que podría afectar los contratos inteligentes de Ethereum, permitiendo modificarlos y posteriormente extraer fondos. Y aunque la solución para este se presentó sencilla, varios usuarios de la red llegaron a opinar que esto podría ser sólo la punta del iceberg en fallas no identificadas que podrían afectar la plataforma en un futuro y, por supuesto, acabar con el alto precio del que ahora goza el ETH.
Sin embargo, parece que las ventajas de Ethereum siguen siendo más atractivas que sus riesgos. Grandes compañías como Deloitte, el Banco Real de Escocia y Microsoft están desarrollando sus propios proyectos basados en esta plataforma descentralizada, e inclusive la última creó un grupo de trabajo específico para mejorar la seguridad de los contratos inteligentes. Así que es probable que el ETH, después de todo, se recupere de este revés.