Mark Karpeles, CEO de la extinta casa de cambio Mt. Gox, será sometido a juicio en Tokio la próxima semana por cargos derivados a la desaparición de cientos de millones de dólares en criptomonedas de las bóvedas digitales de la compañía.
El ex directivo quien aparentemente ostentaba un lujoso penthouse de unos $11 mil dólares al mes y gastaba dinero en diversas actividades de dudosa moral , como la prostitución, está enfrentando acusaciones de malversación de fondos y manipulación de datos de sus clientes.
Karpeles fue detenido por primera vez en Tokio a comienzos de agosto de 2015 bajo acusaciones de malversación de los fondos en bitcoin con su compañía Mt. Gox. Después de estar detenido durante un período de tres semanas, el plazo máximo para que los sospechosos permanezcan detenidos sin cargos formales en Japón, Karpeles fue apresado por los cargos antes nombrados pero fue puesto en libertad bajo fianza y ha estado esperando un nuevo juicio desde entonces.
Un total de $480 millones de dólares fueron vaciados de las arcas digitales de la, en aquel entonces, mayor casa de cambio de criptomoneda en el mundo, la cual manejaba cerca de un 80% del volumen total de transacciones del mercado bitcoin. Con todo, los intercambios cesaron bajo el alegato de que 850.000 criptomonedas habían “desaparecido”.
La respuesta dada por la compañía inicialmente fue que había un error en el software de seguridad donde se almacenaban los bitcoins, permitiéndole esto a los hackers la sustracción del dinero.
Inmediatamente la presión y las demandas para la devolución de fondos por parte de los clientes no se hicieron esperar. Karpeles se manifestó y dijo que habían encontrado algunas de las monedas que faltaban en un dispositivo de almacenamiento en frío o cold wallet; unos 200.000 de los 850.000 bitcoins.
Como resultado Mt. Gox pronto se declaró en bancarrota después de este gran escándalo para tratar de protegerse de una gran cantidad de inversores y clientes enojados. Como es lógico, el efecto de esta apropiación indebida de fondos dejó un enorme daño en la confianza de las criptomonedas y vio un descenso sustancial en su precio.
Sería hasta finales de junio de este año que finalmente se pudieron conocer pistas sobre el posible paradero de algunas de los bitcoins robadas. Esto fue posible gracias a la compañía de análisis de blockchain, Chainalysis.
Se espera que Karpeles se declare inocente en este nuevo juicio, según informó su abogado Kiichi Iino al portal JapanTimes. El defensor asegura que su defendido “se mantiene tranquilo mientras el proceso se judicial se pone en marcha”.
Karpeles, quien afirma que está trabajando actualmente como consultor de tecnología, está activo en las redes sociales y ha comentado sobre asuntos relacionados con bitcoin, pero nunca sobre detalles de su caso criminal.
Las personas afectadas por la caída de la compañía todavía están tratando de obtener razón sobre fondos que perdieron. Basados en discusiones en los medios de comunicación social, muchos clientes, durante el transcurso del juicio, aún esperan encontrar detalles claros de qué fue lo que salió mal.
Por ejemplo, Kolin Burges, inversionista del Reino Unido, afectado por el colapso de Mt.Gox, en el que perdió dinero, admite que aunque el juicio es lo correcto, probablemente no aliviará a aquellos que confiaron desde el principio en la compañía:
Los cargos que se le imputan a Mark solo cubren una pequeña parte de los asuntos que estaban ocurriendo en Mt. Gox, así que no espero que podamos encontrar la mayor parte de la información que queremos saber. Por otra parte, aunque no tengo ninguna razón para esperar algo como esto, espero que, finalmente, todos los clientes puedan obtener un pequeño porcentaje de su dinero como parte de compensación por la quiebra.
Kolin Burges
Inversionista afectado
En ese mismo orden de ideas, llama la atención la iniciativa emprendida por el gobierno nipón en marzo para compensar a una parte de inversionistas afectados por el desplome de la compañía liderada por Karpeles. 45.609.593.503 yenes serían destinados a pagar reclamos de los afectados por la bancarrota, según Nabuaki Kobayashi, fideicomisario de Mt. Gox.
Este esfuerzo junto con una revisión al marco legal en el cual se desenvuelven las criptomonedas en el país del sol naciente constituyen esfuerzos tangibles cuyo propósito es prevenir este tipo de situaciones y castigar severamente a los responsables de delitos similares.
Si Karpeles es declarado culpable por un tribunal japonés, país que tiene una de las tasas de condena más altas del mundo, podría enfrentar hasta cinco años de prisión o una multa de hasta 500 mil yenes, es decir, $4 mil dólares.