La Commonwealth of Nations o Mancomunidad de Naciones, publicĆ³ el dĆa 3 de Febrero un reporte instando a sus 53 paĆses miembros a aclarar el statusĀ legal de bitcoin y demĆ”s criptomonedas en sus territorios.
La informaciĆ³n se dio a conocer a travĆ©s de una nota de prensa publicada en el portal oficial de la Mancomunidad de Naciones.Ā El reporte, el cual lleva por tĆtulo āThe Commonwealth Working Group on Virtual Currenciesā o āReporte del Equipo de Trabajo de la Mancomunidad sobre Divisas Virtualesā,Ā comienza relatando que en la ReuniĆ³n de Ministros de Justicia de la Mancomunidad, realizada en Botswana del 5 al 8 de Mayo de 2014, emprendieron las primeras aproximaciones a la tecnologĆa al discutir sobre maneras de prevenir el cibercrimen.
Para concretar el acuerdo de proveer asistencia tĆ©cnica a los paĆses miembros de la mancomunidad en la luchaĀ contraĀ problemas como crimen cibernĆ©tico, financiamiento terrorista y lavado de dinero, el Secretariado, Ć³rgano superior de la Mancomunidad, convino en realizar una Mesa Redonda de divisas virtuales el 17 y 18 de febrero de 2015.
Como resultado de dicha Mesa Redonda, se tomĆ³ la resoluciĆ³n de generar un reporte sobre la prevalencia e impacto de las divisas virtuales en la Mancomunidad. AdemĆ”s, enfatizaron la necesidad de guĆa tĆ©cnica para los paĆses miembros sobre el regulaciones y medidas legislativas potenciales que podrĆan ser implementadas para responder de manera efectiva a las criptomonedas. Fruto de estas resoluciones, aparece el mencionado grupo de trabajo que desarrollĆ³ el reporte.
Desde entonces, el grupo conformado por representantes de Australia, Barbados, Kenia, Nigeria, Singapur, Tonga, Reino Unido, el FMI, el Banco Mundial, la Interpol y la ONUDD, con colaboraciĆ³n del FBI y del Departamento de Justicia de los EE.UU, ha estado trabajando en la exploraciĆ³n y entendimiento de la tecnologĆa, reuniĆ©ndose por primera vezĀ de manera formal en agosto de 2015, en Londres, Reino Unido.
El reporte emanado del trabajo de este grupo, explora los beneficios, subraya los riesgos y realiza recomendaciones con el fin de ayudar a los paĆses miembros a responder de manera efectiva a la tecnologĆa y regularla. Establecen, en la nota de prensa, que representa el primer paso de la Mancomunidad hacĆaĀ mejorar sus marcos regulatorios y legislativos con el fin de proteger el uso legĆtimo de las divisas virtuales y prevenir el crimen cibernĆ©tico.
Kathalaina Sapolu, Directora de Estado de Derecho en la SecretarĆa de la Mancomunidad, comentĆ³:
Reconociendo la rĆ”pida expansiĆ³n de las divisas digitales y la necesidad de combatir el crimen cibernĆ©tico, la Mancomunidad formĆ³ un grupo de trabajo de especialistas para ayudar a sus miembros a mejorar sus leyes para aprovechar los beneficios y contrarrestar los riesgos. Este reporte constituye los primeros descubrimientos del grupo y apunta a proveer un recurso informativo y Ćŗtil para ayudar a los legisladores, policĆas, reguladores financieros y autoridades fiscales.
Kathalaina Sapolu
El reporte provee una visiĆ³n general y comprensiva de los desarrollos en el ecosistema de criptomonedas y blockchain, incluyendo secciones donde se remarcan sus mĆ”s importantes casos de uso en esferas como pagos y remesas, donde las monedas virtuales ofrecen una alternativa mucho mĆ”s econĆ³mica y rĆ”pida comparada a la bancaria, hasta secciones no tan positivas donde se comenta sobre los usos de la tecnologĆa por criminales cibernĆ©ticos. Sobre el reporte, comentĆ³ Sandra Sargent, Oficial Superior de Operaciones del Banco Mundial y contribuidora en su realizaciĆ³n:
Es muy alentador observar la puesta en marcha de una aproximaciĆ³n cohesiva y coordinada del reporte de divisas virtuales por parte de los paĆses de la Mancomunidad. Pienso que su valor va mĆ”s allĆ” de la sola audiencia de los Estados de la Mancomunidad. Yo ya lo recomendĆ© a varios clientes del Banco Mundial como un documento guĆa para generar polĆticas.
Kathalaina Sapolu
A pesar de todos los beneficios que el reporte reconoce, no deja de observar el anonimato como un problema, pues le facilita a las redes criminales realizar transacciones financieras desde cualquier lugar del mundo sin ser identificados, sea para compra de drogas y armas, hasta lavado de dinero y financiamiento terrorista. Esto representa un dolor de cabeza para muchos gobiernos, como se ejemplifica en el proyecto de reforma de la ComisiĆ³n Europea, el cualĀ busca introducir las divisas digitales en la Ley Anti-Lavado de Dinero, con el fin de eliminar su anonimato.
Asimismo, el reporte resaltaĀ riesgos para las transacciones individuales por la falta de claridad en torno a la protecciĆ³n al consumidor y las dificultades para retornar el dinero producto de transacciones fraudulentas o disputadas.
Recomendaciones
Es por estas razones que el reporte urge a los paĆses miembros de la Mancomunidad a promover la consciencia sobre las monedas virtuales y los potenciales riesgos derivados de Ć©stas, en sus respectivas jurisdicciones. Recomienda a los reguladores financieros y bancos centrales tomar acciones para confirmar la aplicabilidad de la legislaciĆ³n existente, y llama para que se provea mĆ”s dinero y entrenamiento para el cumplimiento de la ley.
Se exhorta a realizar un esfuerzo colaborativo entre los paĆses miembros de la Mancomunidad y demĆ”s reguladores en el mundo para promover leyes que se ajusten a la tecnologĆa. Se establece que las regulaciones deben ser las necesarias para prevenir el lavado de dinero y financiamiento terrorista, supervisando los usos de cajeros automĆ”ticos y servicios de cambio.
Con todo, el reporte reconoce que los legisladores deberĆ”n aproximarse de una manera innovadora al crear las leyes, pues los crĆmenes pueden ser cometidos sin cambiar su dinero a divisas estatales. Por esto, se recomendĆ³ actualizar la legislaciĆ³n correspondiente a los procedimientos criminales.
De igual manera, se instĆ³ a los estados miembros a realizar declaraciones pĆŗblicas sobre la manera en que las divisas digitales caen dentro de las leyes tributarias cuando son usadas como medio de cambio, sugiriendo a las autoridades fiscales aclarar los regĆmenes tributarios aplicables a las criptomonedas y adaptarlos de ser necesario. Por Ćŗltimo, se exhortĆ³ a extender marcos regulatorios de protecciĆ³n al consumidor para cubrir la industria.
Resalta el hecho de que no se hacen recomendaciones sobre regular los casos de uso de la tecnologĆa blockchain. Por el contrario, se sugiere evitar su regulaciĆ³n, promoviendo que los legisladores se concentren en las interacciones financieras con criptomonedas, quizĆ”s una jugada inteligente en pro del desarrollo tecnolĆ³gico dado que todavĆa se desconocen todos los potenciales casos de uso de blockchain.
A pesar de no estar reguladas o estar sub-reguladas, las divisas digitales son legales en todos los paĆses de la Mancomunidad de Naciones, excepto en Bangladesh. Esto comprenderĆa a Antigua y Barbuda, Australia, Bahamas, Barbados, Belice, Botsuana, BrunĆ©i, CamerĆŗn, CanadĆ”, Chipre, Dominica, Fiyi, Gambia, Ghana, Granada, Guyana, India, Jamaica, Kenia, Kiribati, Lesoto, Malaui, Malasia, Maldivas, Malta, Mauricio, Mozambique, Namibia, Nauru, Nigeria, Nueva Zelanda, PakistĆ”n, PapĆŗa Nueva Guinea, Reino Unido, Ruanda, Islas SalomĆ³n, Samoa, San CristĆ³bal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa LucĆa, Seychelles, Sierra Leona, Singapur, Sri Lanka, Suazilandia, SudĆ”frica, Tanzania, Tonga, Trinidad y Tobago, Tuvalu, Vanuatu y Zambia.
Si bienĀ algunas de las resoluciones del reporte posiblemente no sean del agrado de los miembros mĆ”s radicales de la comunidad bitcoin, aquellos firmemente contrarios a las intervenciones estatales, no se puede negar que las propuestas emanadas por el Grupo de Trabajo impulsaran la adopciĆ³n de criptomonedas.
El hecho de que uno de las primeras sugerencias del reporte sea impulsar la consciencia de las divisas digitales en los paĆses miembros de la comunidad, estandoĀ estos 53 paĆses ubicados en los 5 continentes del planeta, profundizarĆ” el grado de adopciĆ³n de las criptomonedas en el mundo al alentar su reconocimiento y difusiĆ³n. AdemĆ”s, se reconoce el perjuicio de limitar la tecnologĆa blockchain, promoviendo el desarrollo de casos de uso potenciales a travĆ©s de esta herramienta.
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