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El régimen de las licencias solo aplica a granjas de minería con alto consumo eléctrico.
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La medida regulatoria ha fracasado en atraer la atención de inversionistas extranjeros.
Irán está regulando activamente a los mineros de criptomonedas, meses después que el gobierno del país introdujera un régimen de licencias.
El Ministerio de Industrias, Minería y Comercio ha emitido más de 1.000 licencias para los mineros de criptomonedas, según informa un funcionario de la Organización de Gremios de las Tecnologías de la Información (TIC) de Irán (IIG), un organismo de la industria que representa el sector informático del país.
Amir Hossein Saeedi Naeini de la IIG dijo que a pesar de que ahora hay operaciones de minería de criptomonedas licenciadas en el país, las nuevas regulaciones no han atraído a muchos inversionistas extranjeros, según un reporte publicado en un medio de comunicación.
«Nuestro estudio muestra que la industria de la minería de criptomonedas tiene el potencial de añadir USD 8.500 millones a la economía», dijo. «Sin embargo, la mayoría de los posibles inversionistas se han ido a países vecinos debido a que estos ofrecen mayores incentivos para los mineros de criptomonedas».
La industria minera de Irán ha crecido significativamente en los últimos años, con muchos operadores sintiéndose atraídos al país por las tarifas de la electricidad más económicas, que son subsidiadas por el Estado. Algunos de los canales en línea de minería de criptomonedas más populares de Irán tienen cientos de miembros.
En 2019 el gobierno iraní propuso una legislación que oficialmente reconocerá la minería de criptomonedas como una actividad de negocios legítima. Según el borrador de la propuesta, los operadores de los mineros deberán presentar información detallada sobre sus actividades de minería, a cambio de una licencia que deberá ser renovada cada año.
El régimen de licencia, que recibió la aprobación formal de parte del Ministerio de Industria, Minería y Comercio a mitad del año pasado, solo aplica para las granjas de minería cuyos equipos consuman más de 30 kilovatios de energía, excluyendo a las operaciones domésticas más pequeñas.
Previo al sistema de licencias, algunos operadores de equipos para minería de criptomonedas le dijeron a un medio que ellos operaban bajo un clima de temor, dado que las penalizaciones por incumplimiento son altas. Quienes eran capturados podían enfrentar multas, la confiscación de sus equipos de minería e incluso corrían el riesgo ir a la cárcel. Algunos dijeron que se sintieron forzados a considerar el mudarse a países vecinos.
El pasado junio, los oficiales confiscaron más de 1000 equipos de minería de dos operadores después que el gobierno los inculpara por crecimiento abrupto del 7% en el consumo de electricidad.
Versión traducida del artículo de Paddy Baker, publicado en CoinDesk.