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El nuevo ente supervisor estará conformado por las autoridades de cada país y organismos de la UE.
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Los emisores de stablecoins estarán bajo supervisión de la Autoridad Bancaria Europea.
La Comisión Europea (CE) dará a conocer, en las próximas semanas, un proyecto de regulación para las criptomonedas -especialmente las stablecoins– que será aplicado en los países miembros de la Unión Europea (UE) y entraría en vigencia a finales de 2020.
De acuerdo a la información publicada en elEconomista.es el 10 de septiembre, cuyo equipo periodístico tuvo acceso al borrador de la propuesta, el proyecto planea crear un equipo de supervisores con autoridades nacionales y organismos de la UE. Estos equipos serán presididos por la Autoridad Bancaria Europea (ABE), ente que cobraría mayor protagonismo en el control del sector de las criptomonedas en la región.
Las entidades supervisoras estarán conformadas por la autoridad nacional del Estado miembro, la Autoridad Europea de Valores y Mercados, y el Banco Central Europeo (o cualquier banco central de la UE). Se encargarán de revisar el funcionamiento y uso de criptomonedas «significativas» (riesgosas), entre las cuales se mencionan proyectos semejantes a Libra (stablecoin de Facebook).
La regulación se aplicará en escala, imponiendo normas más estrictas -en términos de obligaciones, supervisión y sanciones- a las criptomonedas que se consideran riesgosas. A los criptoactivos que se evalúen como menos riesgosos se aplicarán normas más laxas. Las monedas digitales de banco central (CBDC), actualmente en desarrollo, quedarán exentas de regulación.
Los supervisores tendrán competencias tanto para solicitar a los emisores de criptomonedas que mantengan más fondos propios, como para revocar la autorización de operación si hay incumplimientos graves (no queda claro a quien se refiere el borrador cuando se habla de emisores). Las funciones de supervisión serán financiadas mediante tarifas que la ABE impondrá a los “emisores más importantes”.
El proyecto plantea que sea ABE quien evalúe las opiniones de los supervisores de cada país. También tendrá facultades para realizar investigaciones e inspecciones, e imponer multas de hasta el 5% de la facturación anual de los emisores, o el doble de las ganancias obtenidas o pérdidas evitadas con la infracción. Aunque en este punto tampoco se especifica en qué casos aplicarían tales multas.
Los desarrolladores de criptoactivos deberán presentar a sus usuarios un documento técnico con información sobre el emisor, el token o la plataforma de negociación. Este material tiene que ser previamente aprobado por los reguladores nacionales y europeos.
Los emisores de «tokens de dinero electrónico significativo» (como la Asociación Libra) tendrán que convertirse en una institución de crédito o de dinero electrónico, con requisitos más estrictos, quedando bajo la supervisión directa de ABE.
Según la publicación, se prevé que las legislaciones nacionales para criptoactivos, que han adelantado países como Alemania, Francia y Malta, funcionen bajo estas normas comunitarias.
Es así como la Comisión Europea se propone brindar seguridad jurídica, apoyar la innovación, y proteger a los consumidores e inversionistas; además de “garantizar la estabilidad financiera y la integridad del mercado en la UE”, según señala el borrador del documento.
Este plan para una regulación estándar en la región ha sido respaldado por Alemania, Francia, Italia, España y los Países Bajos en un borrador de declaración conjunta visto por Reuters. Según señala la agencia de noticias este 11 de septiembre, estos países apoyan la idea de que no se debería permitir que las monedas estables operen en la Unión Europea hasta que se hayan abordado los desafíos legales, regulatorios y de supervisión.
Los cinco miembros de la UE añaden a las propuestas que las stablecoins tengan una paridad de 1: 1 con activos de reserva denominados en euros o monedas de los estados miembros, y que se depositen en una institución aprobada por la Unión Europea. Tal como señala el borrador del proyecto, consideran que las entidades que operen esquemas de criptomonedas ancladas deben estar registradas en la UE.
Propuesta de regulación se basa en consulta a expertos
Desde hace varios años la CE viene trabajando en un marco regulatorio para las criptomonedas. En diciembre de 2019 abrió una consulta con expertos, recibiendo opiniones sobre las necesidades de regulación del sector. Google y PayPal participaron en el proceso.
Muchas de las ideas de la consulta se evaluaron en un documento “oficioso” elaborado en abril 2020, titulado “Activos criptográficos. Desarrollos clave y regulatorios”.
Con base en este material el equipo de la CE trabaja en la propuesta regulatoria. Entre las prioridades se halla la definición de los tipos de criptomonedas, y la introducción de cambios en la Directiva II de Mercados de Instrumentos Financieros (MiFID II 2014/65 / UE). Esto para incluir a los criptoactivos dentro de este marco legal.
El informe pone énfasis en regular las stablecoins, tildándolas como riesgosas para el control de la política monetaria. Contempla ampliar la supervisión del sector y exigir la aplicación de normas contra el lavado de dinero a exchanges de criptomonedas, proveedores de carteras y emisores de tokens título valor. Se alinea así con las normativas del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).
Regulación estándar para Europa
En un discurso pronunciado en junio pasado, el vicepresidente Ejecutivo de la CE, Valdis Dombrovskis, ya venía refiriéndose de la necesidad de aplicar una regulación estándar en los países de la Unión Europea:
«La falta de certidumbre jurídica se cita a menudo como el principal obstáculo para el desarrollo de un mercado sólido de criptomonedas en la UE. Esta es una buena oportunidad para que Europa refuerce su posición internacional y se convierta en un referente mundial, con empresas europeas a la cabeza de las nuevas tecnologías para la financiación digital.»
Entre los objetivos de esta legislación se busca la creación de un mercado único para los criptoactivos, de modo que puedan intercambiarse en todas las fronteras de la UE.
Al aplicar la misma regulación también se responde a una petición del parlamento Europeo, que en abril solicitó homologar las normas y poner fin al arbitraje regulatorio relacionado con criptomonedas. Una forma de utilizar las lagunas de los sistemas regulatorios para evitar normas desfavorables.
Sobre las repercusiones de esta propuesta en el ecosistema se pronunció recientemente el presidente de la Federación Blockchain de Bruselas (Bélgica), Bruno Schneider. Para el directivo, la regulación proporcionará seguridad jurídica tanto para el uso de criptoactivos no cubiertos por la legislación vigente en la UE, como para las implementaciones de blockchain.