-
Hace dos años, bitcoin perdió 40% de su valor de mercado en un día.
-
La guerra ha aumentado la volatilidad del mercado, pero parece tender a estabilizarse.
Hoy, hace dos años, el mundo se paralizó. La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró oficialmente la entrada a la primera pandemia en 100 años, en este caso por el coronavirus, y los mercados reaccionaron a la baja.
De manera muy abrupta, todo colapsó. Bitcoin no fue la excepción, con una caída de 40% durante la jornada del 12 de marzo de ese año. Ese día, la criptomoneda pasó en cuestión de pocas horas de casi 8.000 a 4.400 dólares al cierre de la vela diaria.
Al día siguiente, el comienzo parecía todavía más aterrador: BTC fue incluso hasta los 3.700 dólares en su punto más bajo, en datos de CoinMarketCap. Un valor de mercado que la criptomoneda no había tocado para ese momento en un año. Desde el mes de marzo anterior.
Las alarmas se desataron por esos dos datos. El precio más bajo en un año, más 40% de caída en un día, no eran buenos presagios para un mercado que, apenas semanas atrás, tenía la mirada puesta en el inicio de un nuevo ciclo alcista en el cual BTC fijara nuevos máximos históricos de precio.
En ese momento, todo lucía muy gris para el futuro cercano: no solo bitcoin caía intensamente. Todas las criptomonedas siguieron el mismo patrón y el mercado perdió, en un par de días, casi la mitad de su capitalización total. Para ese entonces, de más de 220.000 a unos 138.000 millones de dólares, como reseñamos en CriptoNoticias en esa ocasión.
También los mercados tradicionales se comportaron como si el mundo se fuera a acabar. Caía bitcoin, caían las criptomonedas; pero también el petróleo, los índices bursátiles, el petróleo, hasta el oro.
Pronta recuperación… la debacle en perspectiva
Parece una locura, visto dos años después, que 1 bitcoin completo se pudiera comprar por menos de 4.000 dólares hace tan poco tiempo. Ahora, con caídas por debajo de 40.000 dólares por unidad, los mercados sienten miedo. En aquella época, se soñaba con la ruptura del máximo histórico que estaba vigente: 20.000 dólares era la marca a romper.
La perspectiva ha cambiado, claramente, estando 10 veces por encima de aquellos precios. Ahora mismo sería una debacle ver a BTC en los 20.000 de nuevo, porque implicaría otra caída de más de 40%.
Pero es que la recuperación de los embates de la pandemia fue además rápida: para mayo, un mes y medio después de la caída, ya bitcoin había superado el precio en el que se encontraba antes de la declaración de la pandemia. Después de eso, no ha vuelto atrás hasta la fecha.
Hace un año revisitamos el escenario de inicios de la pandemia y ya habíamos determinado que la caída lucía imperceptible en términos históricos. Los gráficos mostraban como una pequeña vela lo que ese día fue todo un acontecimiento.
Ahora, aunque la criptomoneda está incluso por debajo de los niveles de hace un año, el gran «crash» de 2020 sigue luciendo como poca cosa, puesto en una perspectiva de largo plazo. Para que BTC tuviera un día tan sangriento, tendría que caer unos 15.000 dólares o más en 24 horas.
Un bajón de 4.000 dólares como el de 2020 significaría «apenas» alrededor de un 10% de movimiento en los mercados. Lo cual nos lleva a nuestro siguiente punto: el «caos» del mercado a raíz de la declaración de la ofensiva militar de Rusia en Ucrania.
La guerra, ¿el nuevo «efecto pandemia»?
Solo con revisar los movimientos de precio de los últimos días y compararlos con los del inicio de la pandemia, podemos llegar a una directa y firme conclusión: bitcoin ha resistido mucho más que en aquella ocasión, al igual que los mercados tradicionales.
En principio, podríamos decir que esto se debe a una clara diferencia entre las dos situaciones: la pandemia era una declaración que afectaba a todos, en el mundo entero, casi por igual. No totalmente, porque cada país tiene sus propios contextos, pero la pandemia es un fenómeno global, por lo que la respuesta de los mercados también fue global.
Por el contrario, y aunque haya quienes presenten el escenario como una tercera guerra mundial, lo cierto es que el escenario bélico se reduce de momento al territorio ruso y ucraniano, mientras los involucrados externos se pueden contar con las manos y su participación se restringe al terreno político y económico, no al militar.
La guerra, por ahora, no es comparable. El comportamiento de bitcoin respalda esa afirmación, a pesar de haberse tambaleado un poco desde el comienzo de la incursión militar en Ucrania.
Tal como en un reportaje que publicamos en CriptoNoticias hace unos días, el analista Eduardo Gavotti consideraba que solo en un escenario de guerra a gran escala los mercados caerían significativamente. De hecho, entre sus apreciaciones compartidas con este medio calificaba a la debacle pandémica como un evento «quizás inédito, único en la historia».
No es que bitcoin no haya sufrido. Claro que lo ha hecho en las últimas semanas. Incluso, una prueba de ellos es la volatilidad que ha vivido, la mayor en 6 meses. Pero, nuevamente, puesto en perspectiva, bitcoin es menos volátil que durante las eventos de marzo y abril de 2020. Y, en general, los datos de análisis de firmas como Coin Metrics muestran que la criptomoneda tiende a la estabilización.
La criptomoneda se mantiene en un rango en el que ya venía moviéndose antes del conflicto, entre su nuevo piso, alrededor de los 36.000 y 37.000 dólares; y sin lograr romper su resistencia, ahora misma de 45.000 dólares.
Halving, ciclos de bitcoin y pronósticos cumplidos
Finalmente, la otra lección sobre bitcoin que obtuvimos, viendo en retrospectiva, en 2020, es que sus ciclos de mercado están claros y parten desde su propia configuración. Tal como se ha dicho en este medio y coinciden diversos analistas, el ciclo de reducción de la emisión de BTC es determinante en sus comportamientos de mercado a largo plazo.
Ese año, ya la expectativa de todos estaba puesta en esa reducción de recompensas desde meses atrás. Y todo está escrito en el código, que se cumple cabalmente en la red Bitcoin: el halving es ese mecanismo que, cada 210.000 bloques minados en Bitcoin se reduce a la mitad las recompensas que reciben los mineros.
Es decir, cada cierto tiempo (unos 4 años aproximadamente) comienzan a entrar menos BTC en circulación. Se reduce la oferta mientras, en el mundo, la demanda parece ir en aumento cada vez más.
La llegada de la pandemia marcó un claro retroceso en ese camino hacia los nuevos máximos que todos esperaban por el halving, luego de un comienzo de año prometedor. Pero tardó poco en recuperar el rumbo y cumplir con las profecías.
Ahora mismo estamos cerca de la mitad del nuevo ciclo. Aproximadamente en mayo de 2024, cada bloque pasarán a emitirse 3,125 BTC, en comparación con los 6,25 de la actualidad. La pandemia no pudo con bitcoin, tampoco ha podido la guerra.
¿Cabría entonces pensar que la historia se repetirá? ¿Entrará en un nuevo ciclo alcista bitcoin durante ese año? ¿Habrá algún evento global que rete su crecimiento exponencial en el mercado?