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El doble empleo del petro como unidad de cuenta y variación del tipo de cambio, genera confusión.
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Para la primera se cotiza en 36.000 bolívares soberanos, para la segunda su precio es de 94.353 VES.
La agitación política y la crisis económica que experimenta Venezuela tienen múltiples ramificaciones que abarcan al poder ejecutivo, al judicial, el legislativo y hasta el petro, el supuesto criptoactivo anunciado por Nicolás Maduro, en diciembre de 2017, como un mecanismo para “avanzar hacia nuevas formas de financiamiento internacional para el desarrollo económico”.
Desde entonces, han sido diversos los anuncios sobre su utilidad, comercialización, adopción entre los venezolanos y tipos de uso para la administración pública. Sin embargo, su alcance real para mitigar la situación actual aún es una tarea pendiente que el gobierno trata de saldar.
Doble propósito
El petro es utilizado por el Estado con un doble propósito que sigue generando confusión entre los usuarios. Por un lado, es empleado como una unidad de cuenta, con un valor que varía solo por decreto presidencial y que actualmente se ubica en los 36.000 bolívares soberanos. Por otro lado, el libro blanco del criptoactivo señala que “el valor inicial del petro estará fijado en los 60 USD”, que lo ata a una variación del tipo de cambio.
Como unidad de cuenta, el petro es referencia para determinar, entre otros aspectos, el monto del salario mínimo mensual a pagar a los empleados en el país, el cual se ubica en 18.000 bolívares soberanos, o lo que es lo mismo medio petro. Además, también sirve para determinar el costo de otros trámites como la emisión o renovación de pasaportes.
En su discurso de memoria y cuenta, del pasado 14 de enero, Maduro anunció que el precio del petro ascendería a 36.000 bolívares soberanos, desde los 9.000 en los que estuvo fijado previamente. Es decir, un incremento del 300%.
El escenario es más complicado debido a que el petro también es utilizado como una variación del tipo de cambio. En este punto es importante recordar que en Venezuela no existe, desde el año 2003, una libertad cambiaria plena en relación con las monedas nacionales como el dólar estadounidense, el euro o el peso colombiano.
Quienes deseen obtener dólares deben registrarse para participar en las subastas semanales que organiza el Sistema de Mercado Cambiario, mejor conocido como Dicom. Este organismo asigna montos a empresas o particulares que optan por las divisas con un determinado fin, el cual debe ser explicado. Este mercado genera una cotización que actualmente se ubica en 1.572,55 bolívares soberanos, según la subasta número 86.
De lo anterior se desprende que si el precio del dólar oficial mantiene esa cotización, y que el precio del petro es de 60 USD, según su libro blanco, entonces 1 petro tiene un valor nominal de 94.353 bolívares soberanos, muy por encima de los 36.000 VES que evidencia como unidad de cuenta. El problema se complica aún más debido a que el propio Banco Central de Venezuela publica, en su página web, ambas cifras.
En el portal oficial del petro también se muestran otras cotizaciones del criptoactivo en monedas extranjeras. Así el petro cuesta, según esto, 52,43 euros, 405,46 yuanes chinos, 3.943,81 rublos rusos o 59,70 dólares.
Respaldo en petróleo
El petro, en teoría, está respaldado en un 50% por reservas petroleras venezolanas ubicadas en la faja del Orinoco. El otro 50% se reparte entre reservas de oro (20%), hierro (20%) y diamantes (10%), según su libro blanco en el que se puede leer lo siguiente:
“El valor del petro (…) estará anclado al valor de la cesta venezolana de petróleo”. En otro punto del documento se explica: “El valor incial del petro estará fijado en 60 USD (…). Sin embargo, a partir del momento inicial, el valor del petro se actualizará por un índice que estará compuesto por una canasta de commodities representativos de la riqueza del subsuelo venezolano”.
Sobre este punto, el economista Manuel Sutherland, en entrevista con El Universal, señala que “nadie sabe porqué el precio del petro no tiene ninguna relación con el precio del petróleo que ha venido bajando, pero sí tiene relación con la devaluación del Dicom que es lo que refleja de alguna forma al petro”.
Guaidó fijó posición
El presidente de la Asamblea Nacional (AN) y proclamado presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, se refirió al petro en diciembre del 2017 cuando lo catalogó como una “guiso-moneda”, en alusión a que se podría tratar de una potencial estafa.
A través de su cuenta en twitter @jguaido, el diputado cuestionó el lanzamiento realizado por Maduro días antes e indicó: “Maduro dice que el petro tendrá como respaldo la faja petrolífera, es decir no es una Cripto Moneda, puede ser un bono electrónico con respaldo o cualquier estafa que nadie les creerá. Una Guiso-Moneda en definitiva”.
Incluso, el propio presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, promulgó, en marzo del año pasado, una orden ejecutiva que prohibía a los estadounidenses comerciar con criptomonedas del gobierno venezolano.
Luego de más de 1 año de su anuncio, para intentar regularizar la situación económica nacional, el petro no ha ayudado a minimizar los problemas financieros de Venezuela, tampoco ha ganado terreno en adopción y su comercialización está limitada a un puñado de casas de cambio poco conocidas.
A pesar de los intentos del gobierno nacional de masificar el uso del petro, sus intentos no han sido exitosos, al contrario, los inconvenientes financieros se han multiplicado con una hiperinflación interanual, para noviembre de 2018, calculada en 1.299.724 % por la AN. Además, también hay que mencionar que el año pasado el país cerró con una contracción económica del 18%, de acuerdo a estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI).
En medio de la complicada situación que experimenta el país, el petro ha dejado deudas pendientes. El gobierno venezolano, ante la dificultad de obtener financiamiento internacional por las vías ordinarias, apostó por un proyecto cripto que sigue dejando más dudas que respuestas y, especialmente, soluciones en el campo económico.
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