Las grandes casas de subastas como Sotheby´s o Christie´s están investigando la aplicación de blockchain en su modelo de negocio, según explicó ayer Rafael del Castillo Ionov, abogado y experto en transacciones internacionales con criptomonedas.
Del Castillo pronunció estas palabras durante la celebración de la mesa redonda “Arte, cultura y blockchain: los nuevos retos jurídicos”, organizada por la Asociación Derecho de la Cultura (ADC), en colaboración con el Centro Universitario Villanueva de Madrid. Junto a Del Castillo también participaron la abogada Cristina Martínez-Tercero, experta en Propiedad Industrial e Intelectual; Miguel Ángel Recio, especialista en gestión cultural, y el abogado y periodista Rafael Delgado Maldonado de Guevara, presidente de ADC y experto en Patrimonio Histórico.
Del Castillo abordó la aplicación de blockchain en las industrias culturales y creativas desde un punto de vista jurídico y mercantil, y explicó que la cadena de bloques afectará seriamente al papel intermediador que desempeñan las casas de subastas. Este abogado, que ocupa el cargo de director general adjunto para asuntos corporativos y legales en RusHydro, afirmó que Sotheby´s facturó en 2016 más de 4.000 millones de dólares, haciendo de intermediario entre compradores y vendedores para autentificar y valorar las obras de arte y asegurar la transacción de las mismas. “La tecnología blockchain permite crear registros de certificados digitales de autenticidad y origen que permitan verificar la autenticidad de una obra de arte y ofrecer un registro histórico de dicha obra a lo largo del tiempo”, explicó Del Castillo.
Del Castillo afirmó que las galerías de arte tendrán que reinventarse, si no quieren desaparecer, y citó el caso de la empresa Maecenas, la compañía blockchain que está democratizando el acceso a las obras de arte, dividiendo cada cuadro en fragmentos que pueden ser adquiridos con tokens.
El abogado español también aludió a la tokenización y su significado para las industrias culturales y creativas:
Los operadores podrán financiar sus proyectos mediante una Oferta Inicial de Moneda (ICO), lo que permitirá convertir piezas artísticas de baja liquidez y un elevado valor, en unidades financieras negociables con mayor liquidez, como si se tratara de acciones de una sociedad. Es un auténtico proceso de democratización de acceso al arte que dejaría de estar reservado a los grandes patrimonios como activo de inversión.
Rafael del Castillo Ionov
Director General Adjunto
Del Castillo, de padre español y madre rusa, con despacho en Rusia, España y Suiza, está a punto de publicar un libro sobre las ICO y la tokenización de la economía, donde abordará la problemática jurídica de las mismas. Su propuesta pasa por la creación de un régimen que aporte seguridad jurídica y permita desencadenar todo el potencial de la blockchain.
En su turno de intervención, Martínez-Tercero habló del impacto de blockchain en propiedad intelectual y relató las grandes aportaciones que la cadena de bloques traerá en el ámbito de los derechos de autor; entre ellas, un modelo más justo de retribución de las creaciones de manera automática. También explicó su aplicación en el control de la cadena de distribución y en la lucha contra las falsificaciones
La intervención de Recio, por su parte, giró en torno a la necesidad de abordar la modernización de la cultura para adaptarla al mundo en que vivimos y hacerla mucho más expansiva. Recio, que ha ocupado el cargo de director general de Bellas Artes y Bienes Culturales, Archivos y Bibliotecas de España, explicó que las industrias culturales suponen el 3,5 del PIB español y se refirió a este país como una gran potencia patrimonial.